Desde la incorporación de la ciudad de Málaga a la Corona de Castilla, en 1487, el Mar Mediterráneo pasó a ser frontera con el Norte de África; pero también fue vía de comunicación entre ambas orillas. A partir de entonces, los pueblos de la actual provincia de Málaga vivieron y vieron de muy distinta forma aquellas tierras. Lo cierto es que África, sobre todo el norte, Ha significado para la provincia de Málaga, desde el siglo XVI hasta el presente, muchas cosas: dolor, guerra y tristeza; pero también, riqueza, comercio y alegría. El año 1921 se cumple el centenario de uno de los sucesos más terribles que ocurrieron en África: ¿El desastre de Annual¿. El derrumbe de la Comandancia General de Melilla y la muerte de miles de españoles a manos de las cabilas insurrectas quedarían en la memoria de todos los malagueños. A las escenas de los heridos en los hospitales de sangre y las del paso de las unidades enviadas en socorro de Melilla, tanto por las estaciones de ferrocarril como en el embarque en el puerto malagueño, se unirán las noticias de hechos heroicos protagonizados por malagueños, como el de la posición de Igueriben y su jefe, el comandante Julio Benítez y Benítez. Ciertamente, no serán estos hechos los únicos que relacionen África y Málaga. Existen otros, como la toma de Orán y Argel en el siglo XVIII, la conquista de las Chafarinas en el XIX, o de los peñones de Vélez de la Gomera o de Alhucemas muchos años antes. Auténticas guerras, como las de 1859-1860, 1893-1894, o las campañas de Marruecos entre 1909 y 1927 darán pie a que muchos malagueños intervengan en ellas, como oficiales o como soldados. Todos estos hechos dan fe de la estrecha relación que ha existido entre los malagueños y el norte de África desde hace más de quinientos años.